Desbalance

De a ratos vuelvo a sentirme con la euforia de antes, por contagio o por contrera. Y en el resto (ya sin peros) sigo pidiendo explicaciones a lo que dejé ir, a lo que me sacaron, y a lo que se fue, aún frente a la burda conciencia de que no hay nada que cambiar.
Pero (y ahora sí lo vale) vuelvo a construir, así todo huele a nuevo; reconstruir ya no me basta. Y de alguna forma sutil, lo esencial se acomoda en su lugar otra vez, regalándome una rutina que me pacifica, que me deja ver por encima de mi hombro.
Ojalá que dure; ojalá mejore.